Decir que Almogía es un encantador pueblo de la provincia malagueña no es descubrir nada, pues de sobra son conocidas las bondades de esta hermosa localidad, donde entre entre sus calles brota la paz y la tranquilidad, transmitidas por sus habitantes, gentes amables y educadas.
Lo que hoy queremos es traer un azulejo que se haya detrás del Ayuntamiento, junto a la calle de la Iglesia y frente a la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción. Está en la calle de Sevilla, a la que se accede a través de unas escaleras y tras contemplar el mosaico se sigue la calle después de pasar bajo un arco.
Se trata de un mosaico formado por azulejos, de grandes dimensiones que nos narra de forma breve escenas históricas del pueblo, así como nos informa acerca de usos, medios de producción, fiestas y costumbres tradicionales y seculares de los moriscos, como son conocidos nuestros industriosos ciudadanos de Almogía, ejerciendo ese nombre como gentilicio.
No es, desde luego, el único mosaico que adorna las calles de esta tranquila localidad, no. Un paseo por sus blancas calles nos descubrirá la presencia de otros que alegrarán nuestra vista y amenizarán nuestro paseo. Un ejemplo: la fuente de la plaza de la Constitución: una gozada.
No lo dude: visite Almogía y disfrute de sus azulejos...y del pueblo...y de su gente.
IHPMalagueñas
Málaga - 2017
No hay comentarios:
Publicar un comentario