jueves, 9 de agosto de 2018

SOBRE EL EDIFICIO DE LA MUNDIAL Y LO QUE ESTAMOS DEJANDO DE LADO.

   Desde Investigaciones Históricas Provinciales Malagueñas nos oponemos de manera firme e inequívoca a la demolición del edificio conocido como La Mundial y abogamos por su recuperación y puesta en valor. Lo podremos decir más alto, pero no más claro,

La Mundial: demolición NO, restauración y puesta en valor SI


   No podemos permitir que bajo ningún argumento se pierda más patrimonio arquitectónico en nuestra ciudad, por muy alto o muy bajo valor que este edificio tenga. Es un edificio representante de una época, de un tipo de ciudad, de un tipo de arquitectura, de un tipo de sociedad muy características de Málaga y que está en armonía con los edificios de su entorno -excepto la aberración arquitectónica de la calle Prim número 3-


   Si la idea de demolerlo ya es mala, el hacerlo para construir un hotel de un estilo que se halla los antípodas del dominante en la zona es de juzgado de guardia, pues atenta contra la ciudad, contra el buen gusto, contra la estética y contra la razón. De momento, como muestra, la siguiente foto,que es la de un edificio muerto cubierto por un sudario.


   Pero no se trata solo de la preservación de este edificio, se trata también de preservar unos elementos de la tristemente destrozada calle Pasillo de Atocha, elementos algunos de gran valor por su rareza en las edificaciones malagueñas.

   Corremos el riesgo de que cuando se acometan las obras en esa calle para su transformación definitiva, elementos que aun se conservan sean también demolidos, destruidos o, peor, que pasen a adornar la casa de alguien: nos estamos refiriendo a las puertas y ventanas de las antiguas casas números 4 y 6 de la calle, pero fundamentalmente las puertas. Estas puertas están construidas, como los edificios en que estaban, entre 1876 y 1882.

   En ambos casos, las jambas, flancos o antas, son muy sencillas, en piedra, que junto con el dintel enmarcan la puerta. Son rectas, acanaladas o cajeadas, de menor prestancia que las de los edificios nobles del siglo anterior, partiendo las del número 6 del suelo. Las del número 4 parten del zócalo, aunque las pilastras se apoyan como en dos basas.


Puerta de la casa Nº 4

   Las jambas y el dintel de la casa Nº 4 (obra de Gerónimo Cuervo) deben ser recuperadas por su valor arquitectónico y artístico, como apreciamos más al detalle en las siguientes dos fotos



   Si la casa Nº 4 presenta esas jambas y ese dintel, la casa Nº 6 (obra de Joaquín de Rucoba y Octavio de Toledo) no solo no le va a la zaga, sino que la supera pues presentan unos capiteles muy particulares, diríamos que caso único, pues se trata de cabezas aparentemente masculinas, de estilo clásico, que están tocadas con un klaft* egipcio y teniendo el dintel, aparte de una acanaladura, un altorelieve de forma cuadrada en el que va grabado el número cuatro, que es el que tenía en la calle cuando se construyó el edificio.


   Si como en el caso anterior la observamos más al detalle, comprenderemos mejor la excepcionalidad de esta puerta y la necesidad de protegerla




   El otro elemento a recuperar son las rejerías de las ventanas, al menos las que son recuperables. A continuación unos ejemplos de este elemento







NOTA: El klaft es un tocado de rayas que se coloca sobre la cabeza. Asemeja una especie de melena de león.

#SalvemoselAcueductodeSanTelmo

IHPMalagueñas
Málaga - 2018

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